miércoles, enero 05, 2011

Pedaleando por La Marjal dels Moros

Hace un año y medio mi compañera Blanca me explicó una ruta que había hecho por la Marjal dels Moros, un paraje cercano a la playa de Puçol. Escribió una crónica estupenda, y me envió unas fotos, que convertí en una entrada del blog. La ruta me dió sana envidia, pero con la bici de carretera era imposible de hacer, así que me quedé con las ganas. Hasta hoy, que hemos podido estrenar las bicis nuevas, y hemos realizado esta ruta en compañía de Iñigo.

La ruta no voy a volver a explicarla, porque Blanca lo hizo muy bien. Sólo decir que ahora, supongo que por ser invierno, el recorrido es algo más saltarín, por así decirlo, y es que el camino de arena apenas existe, y los guijarros de las playas son enormes!

Las bicis son buenas, pero no para tanto!
Al no existir el camino, Iñigo se ha subido por la parte de arriba, por una especie de senda muy pequeña, que daba para hacer equilibrios (yo, que soy la más torpe de los tres, me he caído, aunque no ha sido nada grave)

Siguiendo a Iñigo por la senda, haciendo fotos, manillar recto...y bum

 Después de un rato pedaleando llegamos a uno de los miradores para ver las aves de la marjal: estaba repleto de ellas, y la vista resultaba espectacular. También el oído, pues se escuchaban sus piares y cantares.


Iñigo y yo, el panel explicativo y al fondo las aves

Pero lo mejor ha sido llegar a Grau Vell, ese pueblo "de otro tiempo" que tan bien explicaba Blanca. Al llegar he visto los neumáticos pintados y me he emocionado, estaba tal como nos decía, aunque esta vez no había apenas gente por la calle, y el bar estaba cerrado.

El bar de otro tiempo...del tiempo de verano

Eso si, en el bar estaban los mismos carteles de cantantes descoloridos, que ni se sabe el tiempo que llevarían ahí.

Alfredo Rey, "La flor de mis cantes", y Lucila Duarte
 La excursión es realmente bonita, sobre todo porque pasa muy cerca del mar, y está muy cerca de Valencia, así que os animo a recorrer este viaje al pasado, que seguro os encantará. Por mi parte nada más, desearos que os traigan muchas cosas los reyes: yo por delante tengo tres días de vacaciones y una bici nueva, no puedo pedir más. La ruta os la contaré la semana que viene.

Pero que bonita es mi bici nueva! Y que bien va!!

5 comentarios:

SisterBoy dijo...

Caray vaya escenario más postapocalíptico

Anónimo dijo...

Impresionante el Grau Vell¡¡¡ casi que lo tendrían que declarar monumento historico y por supuesto conservar los posters de Alfredo Rey y Lucila Duarte.

Iñibi

El Impenitente dijo...

Estoy con Iñibi (o Inibi, nunca sé). Los posters de Rey y Duarte patrimonio de la humanidad ya.

cucumber dijo...

Tienes razon Sister, el paisaje y el pueblo era parte como volver al pasado y parte como un futuro desolado.

Anónimo dijo...

me lo apunto!!!
que buena pinta.


http://enlabiciroja.blogspot.com/