domingo, febrero 12, 2012

Pedaleando por Les Rodanes

Les Rodanes es un paraje natural, cercano a Valencia, situado entre los municipios de Riba-rroja y Vilamarxant. A través de los dos senderos que lo cruzan, el PR-CV 175 y el PR-CV 283, podemos recorrerlo a pie o en bicicleta, y disfrutar de un respiro rodeados de vegetación y bosque. El sitio es bastante conocido entre los ciclistas de montaña, pero como nosotros hasta hace cuatro días no teníamos la bici adecuada, y desde entonces sólo nos habíamos atrevido por caminos y pistas muy asequibles, nunca habíamos ido. Para conocer Les Rodanes nos hacía falta un guía y un poco de valor: las dos cosas nos las han facilitado Jaruku y compañía, que nos llevan algo de ventaja en esto de la mountain bike y nos ayudan como monitores de campamentos.
Uno de los carteles explicativos de las Trincheras de Les Rodanes
 Esta vez fue Carlos el que preparó la ruta y desde aqui le felicitamos: parecía conocer cada camino y cada senda de las que cruzaban el parque, pero no sólo esas: después nos llevó entre caminos rurales y huertos de naranjos, urbanizaciones, chalets y pistas, asfaltadas y sin asfaltar. Nos sería imposible volver allí sin él, si no es por los adelantos de la técnica: la ruta la marcaron antes de empezar aquí, aunque luego la cambiamos un poco sobre el terreno. El resultado final fue éste.

Dejamos el coche en el Asador Montemayor, porque esta vez después de la ruta teníamos premio: en ese restaurante preparan calçotada, un menú más tipico de Tarragona y el norte de Castellón pero que también ha llegado hasta Valencia.  Podríamos haber ido hasta allí por el rio, que era nuestra primera opción. Pero pensamos que después de este menú nos apetecería poco coger la bici.

Salimos a las 9 y bajamos al rio, donde nos encontrariamos con Pedro, mi compañero bicibibliotecario. Al llegar al rio teníamos todos las manos congeladas, y daba igual lo buenos que fueran los guantes. En mi caso a la altura de Masía de Traver los empezé a sentir, y se me descongelaron del todo pasando Riba-rroja. Pedaleábamos a buen ritmo por este tramo, del que siempre he pensado que es el más bonito del recorrido, a pesar del frío, y antes de llegar a Vilamarxant salimos del rio (la subida nos dejó a alguno sin aire). Para entonces ya había salido el sol, y nadie tenía frío.

La cuadrilla al sol
Carlos nos llevó hasta el inicio del parque natural : carteles, mapas y las señales blancas y amarillas marcan el recorrido. Pedaleamos rodeados de pinos y tierra rojiza, nos gustaron mucho los senderos, y las pistas, y el olor a naturaleza y a verde. Yo voy insegura en las bajadas pero me van esperando, mientras que las subidas de momento no se me dan mal.- Llegamos a un estanque chiquito, y aprovechamos para hacer un descanso.

En el estanque La Balseta, en el paraje natural
Carlos también ha pensado en el almuerzo, y el bar elegido es el de la urbanización de la Horquera, aunque antes de llegar allí nos espera la última prueba. En un desvío a la derecha comienza la subida a las antenas, situadas en lo alto de La Rodana Gran, a 345 metros. Algunos ya la han subido y no tienen ganas de repetir, asi que sólo la mitad nos atrevemos. Se trata de 2 kilómetros con tramos bastante empinados (creo que el Garmin de Pedro marcaba el 17% de pendiente). Yo estoy algo dudosa, pero al final me lanzo, con dos o tres paradas, algún metro andando, y mucha determinación llego arriba: y es que ya me conocéis: yo por una foto así..mato.

Cucumber, Andrés y yo en lo alto del pico
La bajada se hace pensando en el almuerzo. Antes de salir pensábamos almorzar una barrita pero al llegar al bar se nos van las ganas. Nos comemos medio bocadillo, porque sino lo mismo nos desmayamos, y no estaría bien. La segunda parte de la ruta la hacemos en medio llano, o falso llano, o bajando un poco, hacia Loriguilla, siempre por caminos desiertos, disfrutando del pedaleo y de la tranquilidad. Las vistas que vemos bajando son espectaculares.

Bajando y los huertos de Valencia a nuestros pies
En el restaurante el cuenta marca 40 kilómetros, no una gran distancia, diréis, pero con tantas subidas y bajadas las piernas nos duelen un poco. Eso si, todo se nos pasa cuando entramos en el asador y empezamos a oler las brasas. ¿Conocéis los calçots? Son unas cebollas tiernas, que se comen asadas a leña, con una salsa llamada romescu. Los calçots te los sacan así:

Calçots de Valencia
  Y te pones un babero, y unos guantes para comertélas, tienes que pelarlas, y meterlas en la salsa. La verdad están muy buenos. El ritual es entretenido y las fotos bastante graciosas, como ésta:

Cucumber y el calçot
 y piensas, bueno, no es para tanto, es verdura, a la brasa, es sana, y tal. Pero claro, luego te sacan esto:

Alcachofas, butifarra i mongetes
que esta buenísimo, y piensas, bueno es a la brasa, es sano y tal. Pero luego te sacan la crema catalana, que no es tan sana, ni a la brasa, y si encima es el cumpleaños de uno de los del grupo, pues le sacan una tarta, y al final sales de ahi como si hubieras comido para tres días. Super satisfecho. La calçotada nos encantó, pero más aun nos gustaron Les Rodanes, un sitio al que pensamos volver pronto, para conocerlo mejor, en bici o andando.

*Gracias a Carlos por la ruta, que podeis ver aquí.

10 comentarios:

Jaruku dijo...

Ja ja, te has olvidado del cordero, que también era a la brasa... ;-)

En resumen, un gran día en buena compañía, momentos impagables en los que se olvida uno de todo (hasta del frío) y se reafirma en que comprar una bici fue una buena idea.

Un placer poder rodar y brindar con vosotros.

mar dijo...

Ahora también con la bici de montaña, no paráis.

SisterBoy dijo...

¡Imperdonable olvido del del cordero!

cucumber dijo...

Descubrir parajes cercanos a Valencia tan bonitos como éste, supone una sensación emocionante. Descubrir cosas que hasta ahora no habías conocido.(y si además le añadimos unos buenos platos..)

Slim dijo...

jajaja es verdad, anda que yo me comi tres chuletas lo menos!

Jaruku acuerdate de enviarme la ruta de la maquinita, por si le sirve a alguno que quiera repetirla.

Anónimo dijo...

Yo quiero hacer la ruta, pero tiene que incluir el papeo.
Que envidia¡¡¡¡

Inibi.envidioso

El Impenitente dijo...

Dos años, en la carrera de "Árboles y castillos", hice la etapa entre Villamarchante y Ribarroja. Nos hacían subir la Rodana Gran pero por el otro lado, desde Villamarchante, por una senda de cabras que era más una torrentera que una trialera. El resto de la etapa seguía siendo dura pero ya no tanto. Eran pistas.

Echo de menos "Árboles y castillos". Correr por equipos es especial. Y los almuerzos que nos pegábamos después de nuestra etapa no envidiaban al vuestro (aunque sin calçots, eso sí).

cucumber dijo...

Impenitente..subir la Rodana por la trialera, supongo que corriendo..me parece una heroicidad.Los ciclistas estan locos pero los corredores que suben montañas aún más.
Inibi, necesitas la bici de your brother para hacer esa ruta..pero cuando quieras.

El Impenitente dijo...

Cucumber, subíamos corriendo y andando, no te voy a engañar. Y, en la montaña, y aquí incluyo a corredores y ciclistas, el verdadero talento se demuestra bajando. Para subir basta con esfuerzo y tesón. Para bajar como bajan (o como bajáis) hace falta otra cosa. Y yo de eso no tengo. Y por eso os admiro.

Slim dijo...

a mi no me incluyas, que yo no bajo como bajan.