Olímpicos

Veo ayer las imágenes del paso de la llama olímpica por Londres y me apenan las protestas, los disturbios y los 40 detenidos, la imagen de la llama rodeada de policias (aunque vayan en bicicleta), cuando siempre fue para mi un símbolo de unión mas que de desunión.

Manifestantes, bicis, policias, y la llama olímpica en medio ayer en Londres

Hubo un tiempo (perdón por la frase que parece sacada de un trailer de cine) en el que cada verano de Olimpiadas era un acontecimiento, y los deportistas que protagonizaban los juegos eran conocidos en el mundo entero: corredores, gimnastas, atletas. Nos sabíamos de carrerilla los años y las ciudades, y los más memoriones hasta los records mundiales, nos encantaba pasarnos los días viendo las pruebas y las finales, la entrega de medallas y los himnos.

En Montreal 76 nos emocionamos con Nadia Comanecci que se convirtió en un mito olímpico, y mi camiseta con la hoja de roble canadiense en rojo fue mi preferida durante dos o tres veranos. En el 80 hicieron una serie de dibujos animados con la mascota olímpica: era el osito Misha de las olimpiadas de Moscú. De Los Ángeles 84 lo que más recuerdo es la actuación de España en baloncesto: estábamos en jaca, los partidos eran a la 1 o las 2 de la mañana, y cuando eliminó a Yugoslavia salimos al balcón a pegar gritos todos los vecinos, fue una pasada!! Después llegó Seúl en el 88 con Ben Johnson corriendo que se las pelaba y por fin Barcelona 92: yo empecé a llorar en la apertura y me duró hasta la clausura, que derroche de medallas españolas y que bonitas las ceremonias, y que chulo fue todo…ayer les contaba a las niñas estas historias y la verdad es que me gustaría que ellas pudieran ver Pekín 08 con los mismos ojos que lo vi yo, con el espíritu olímpico intacto…o quizá mas que espíritu olímpico es simplemente el espíritu de tener menos de 20 años…es el espíritu que canta La Costa Brava en Olímpicos.