viernes, marzo 27, 2009

PEDALEANDO HASTA DAROCA


La ruta ciclista que me gustaría aconsejar en esta entrada nos lleva desde Tobed a Daroca, en la provincia de Zaragoza. La ida la haremos pasando por Codos, dirección a Miedes y arriba del Puerto cogeremos un desvió que llega a Langa de Castillo, y de este pueblo carretera a la antigua Nacional 330, ahora con poco trafico desde la inauguración de la autovía Mudéjar que ahora une Valencia con Huesca pasando por Zaragoza.

Ya en la carretera Nacional nos dejaremos caer hasta Daroca, una ciudad que guarda verdaderos tesoros, bien protegidos por sus conservadas murallas y torreones, siendo todo el conjunto gótico y mudéjar.
Calle Mayor de Daroca. Los adoquines le dan autenticidad pero son peligrosos para la bici

Daroca se encuentra situada en un barranco, cuya parte más baja constituye la Calle Mayor en cuyos extremos se encuentran las puertas Alta y Baja respectivamente. Desde la puerta Alta se puede recorrer gran parte de la muralla y torreones que circundan a la ciudad.


Puerta Baja y la famosa piedra

En Daroca se pueden visitar varios lugares de interés como Iglesias y Conventos, yo me quedo con la Iglesia de la Colegial, con la fuente de los veinte caños, aunque solo salga agua de uno y con una ristra de jamones de madera colgados en la puerta de un almacén de jamones, y que algún incauto ha pensado alguna vez que eran auténticos. Hombre! En los pueblos son confiados pero no tanto.
Los jamones colgados: La tentación adulta

En Daroca como en otros sitios también tienen su leyenda que toma cuerpo en el misterio de los sagrados corporales que es una historia religiosa y bastante larga y en una gran piedra de molino, a la que llaman el Ruejo la cual en junio de 1575 evitó una gran tragedia al rodar por la calle Mayor y romper la Puerta Baja, liberando de este modo las aguas que en ese momento estaban inundando la ciudad.El Ruejo que salvó a la ciudad

La vuelta de la ruta se puede hacer por la carretera Nacional, hasta Mainar y tomar en este punto de nuevo la carretera hasta Codos y seguidamente a Tobed. Son 70 Km., casi todos muy tranquilos por no decir solitarios, y además visitas una de las ciudades mas hermosas de Aragón, a la que alguien con imaginación la denominó la “Toledo aragonesa”.

8 comentarios:

Slim dijo...

muy bien contado pequeño saltamontes..casi parece que esté allí ahora mismo comiendome un bocata de jamón.

iremos este verano?? yo quiero ir de excursion a daroca!!!

Anónimo dijo...

Desde luego con tus últimas crónicas nos estás haciendo la boca agua. La Diputación Aragonesa no sabe lo que se pierde al no patrocinarte.
Dejáis que me apunte este verano???

Inibi

cucumber dijo...

Estas vacaciones nada de destinos exoticos, nos vamos todos a Aragon, donde el nombre sabe a Jamón.
Bueno Slim, tiene que aprobar, si no la dejamos sin los sabrosos almuerzos ciclistas.

El Impenitente dijo...

Muchas veces pasé junto a Daroca pero nunca entré. Y eso que desde la carretera antigua resultaba tentador quedarse y visitarla, pero no.

Tiene razón Inibi. Yo pediría patrocinio.

Slim, si te van a castigar sin almorzar si no apruebas, ya sabes.

Slim dijo...

nooooooooooooo eso lo ultimoooooooo!!

El Impenitente dijo...

Felicidades, Slimeta. Pasé esta mañana a felicitarte pues tuve que pasar por la obra que tenemos al lado pero se ve que fui demasiado temprano. Que pases un buen día. Besos.

Slim dijo...

muchas gracias!!! jaja pues esta mañana cuando he llegado(tarde, porque queria desayunar con la familia) me dice mi compañera:

ha venido un chico a verte, uno con un chaleco de trabajo.

Y yo mmmm por fin mis amigas me han regalado EL CHICO DE LA COCACOLA LIGHT que les pido todos los años...;-) jajajaja

es broma. Me imagine que eras tu. muchas gracias. Podias prestarme un poco de tu memoria para el examen. un beso fuerte.

El Impenitente dijo...

He preguntado yo por ti, pero el chico de la Coca Cola Light se había quedado fuera. Cuando le he dicho que no estabas se ha llevado un disgusto muy grande. -Bueno-me ha dicho- volveré a intentarlo el año que viene. Se ve que no era la primera vez que iba a verte.