He vuelto

Esta semana hice mi cuarto y último examen de la oposición, y a falta de defender una memoria y contar los méritos parece que la plaza, esta vez sí, está asegurada! El año ha sido muy duro, tanto para mí, que lo he pasado encerrada en la biblio y/o en casa, como para mi compañero (y sin embargo esposo) Cucumber que ha estado al frente de la casa, de la compra, de las niñas, y sin cuya ayuda esto hubiera sido sencillamente imposible. Desde aqui le doy las gracias públicamente porque se lo merece, asi como a todos los que han estado ahí, apoyando desde dentro y desde fuera, confiando en mí, ofreciéndome su ayuda y en muchos casos ayudándome de veras, mis hijas con su confianza ciega en mí, mi padre con el inglés, mis compañeros con las dudas sobre los temas, mis amigos con sus palabras de ánimo, siempre reconfortantes en momentos de bajón, mi profe Esther son sus inmejorables test sobre procedimiento administrativo, mi familia y su apoyo virtual siempre presente, y sobre todo la presencia constante de Emi a lo largo de todo el proceso, juntas en la biblio, juntas en casa, estudiando sin ganas, animándonos la una a la otra y siendo un verdadero apoyo para conseguir lo que he conseguido. A todos muchas gracias, encantada estaré, si puedo, de devolveros el favor con cualquier cosa que me pidáis.

Estos primeros días he andado algo descentrada, sin saber muy bien que hacer con tanto tiempo libre! he salido de cena, he ido al cine, y he dormido la siesta, y hoy por fin he hecho algo que echaba de menos terriblemente: he salido en bici!!

Andaba algo acobardada, después de tantos días sin salir, y efectivamente he vuelto agotada. Pero feliz, feliz. Hemos salido a las 8.00 a.m. por la salida norte, lo que me ha permitido pasar por la nueva y flamante rotonda y su "mirador" (si alguien ha subido, por favor que me lo cuente, que me muero de curiosidad!). La rotonda tiene carril bici todo alrededor, y te permite enlazar hacia Alboraia desde la avenida del Tarongers.

El mirador de la rotonda, una incógnita

Nosotros hemos preferido salir por el camino de Moncada esperando menos tráfico, y desde allí a Náquera. Los primeros kilómetros he ido bastante bien, sin notar la fatiga que dice Perico, un poco más de 20 km. En Náquera, eso si, ha empezado la subida, y los primeros ahogos. Hay dos kilómetros hasta Serra, el pueblo con más pendiente en sus calles que conozco (sus habitantes deben tener todos unas piernacas como rocas). Y desde Serra, a seguir subiendo! en total 5 kilómetros hasta la cima del Oronet, nuestro objetivo, y a donde he llegado con más pena que gloria, resoplando, y muerta de sed, cansancio, calor y hambre (todo a la vez).

El White Team en la cima del Oronet, con la sonrisa puesta

La bajada hacia Náquera, donde hemos almorzado, ha sido un paseo, animada con la perspectiva del bocadillo que nos íbamos a comer, que estaba sencillamente espectacular. Después de un rato de descanso hemos vuelto a coger la bici para volver, tranquilamente, hasta Valencia. Hemos cambiado la ruta, y hemos vuelto por el camino viejo de Liria, y luego por la carretera que va hasta Massamagrell, donde nos hemos encontrado un flamante carril bici que llega hasta las afueras de dicho pueblo. El carril tiene su puente y todo, más chulo!

El puente sobre el carril bici de Massamagrell: una chulada

Al final ya me dolia todo, las piernas, el brazo, buf! pero hemos llegado a casa muy contentos. En total 62 kilómetros: para el primer día no esta mal!! y espero que sea la primera de un montón de salidas con mi Giant.