domingo, mayo 30, 2010

Pedaleando desde el Río Palancia hasta el Lago del Saler

Dos noticias relacionadas con la bici han saltado a los periódicos esta semana, la primera, la ordenanza de circulación del Ayuntamiento aprobada por el Pleno el viernes pasado, y de la que ya dije mi opinión. La segunda, el extraordinario Giro de David Arroyo, en el que quedara segundo hoy si nadie lo impide y en el que ha defendido la maglia rosa durante días. El Giro lo hemos podido ver en Veo7, una de las cadenas de la TDT que al menos nos ha permitido ver la transmisión, con unas etapas de montaña preciosas.

Mientras tanto este fin de semana hemos aprovechado para salir de ruta con la bici. El sábado yo me levanté un poco perjudicada porque habia salido la noche anterior de cena con mis ex-compañeros de Humanidades, asi que me dio el tiempo justo de vestirme mientras Cucumber a toda máquina preparaba mochilas con toallas y bocadillos para las niñas, que se iban de scouts playeros, y además todas las cosas de la bici. Cogimos el coche y fuimos a Petrés, y una vez alli él se dio cuenta de que con tantas cosas que tenía que coger se había olvidado los zapatos de la bici. Asi que entre mi resaca del 15 y sus zapatillas de deporte nadie hubiese dado un duro porque fueramos a hacer más de 10 kilómétros. Y al final hicimos 50 km, buscando un pueblo llamado Algar del Palancia.



Aun no sabíamos que era Alfara de Algimia, pensábamos que era Algimia de Alfara. La iglesia preciosa.


Salimos de Petrés por una carretera que discurre paralela a la autopista hasta cruzarnos con un carril bici que viene del Puerto Sagunto y llega hasta Quart de les Valls, donde termina, y seguimos la carretera que va hasta Torres Torres. La CV-320 no tiene mucho tráfico y pica ligeramente hacia arriba. Antes de llegar a Torres Torres tomamos a la derecha un desvío con la indicación Algar de Palancia. Aunque después de preguntar dos veces, nos dimos cuenta de que era bastante difícil llegar a tal pueblo, ya que te topas con la muy transitada N-225 que hay que evitar a toda costa. El camino asfaltado que seguimos se llama Camí de L'Estepar, aunque no espereis ninguna indicación. Al final por la via de servicio de la nacional llegamos a un pueblo al que creímos Algimia de Alfara. Craso error, pues era Alfara de Algimia. Pero no nos importó porque lo que queriamos era almorzar, y allí nos dieron muy bien, en el Casino del pueblo.



EL almuerzo del Casino, completo y reparador

Después del reparador almuerzo, nos vimos con fuerzas para llegar al famoso Algar de Palancia, y alli que nos fuimos, volviendo después por Algimia de Alfara, esta vez sí, Torres Torres, y tomando alli de nuevo la CV-220 para volver sobre nuestros pasos a Petrés.




El Expreso Segorbina en Algar del Palancia con el Expreso Cucumber

El domingo, más relajados, y cambiando de monturas a nuestras bicis de montaña, decidimos acercarnos al Lago del Saler. Esta es una excursión familiar de unos 16 kilómetros desde el comienzo del carril bici del Saler. El carril se coge junto a la Ciudad de las Artes y las Ciencias, y la primera etapa llega hasta Pinedo, unos 6 kilómetros, como ya contamos una vez. Después continuamos hasta el Saler. Todo este carril está realmente muy transitado, sobre todo los fines de semana, y hay que ir pronto si no quieres verte en un atasco de bicicletas. Y es que la bici está de moda.

Muchos ciclistas en el carril bici al lado del mar

En el Saler el carril bici te saca a la carretera, pero el carril bici continúa paralelo a esta carretera, llamada Del Rio, hasta el municipio del Saler, donde lo abandonamos durante 300 metros tomando la avenida del Saler hasta la rotonda final, al lado de la playa, donde volvemos a tomar carril bici.

Este carril discurre muy cerca de la playa. Al terminarlo, aparece un camino lleno de arena con una cadena para evitar los coches, pero que peatones y bicis pueden transitar. Eso si las bicis haciendo 10 metros de Ciclo-Cross debido a la arena acumulada.

Haciendo Ciclo Cross a toda máquina

Este camino se dirije hacia la zona asfaltada que pasa por delante del Hotel Sidi Saler, y continua hasta una urbanización. En este punto hay otra cadena por la que las bicis pasan sin problema, encontrándose otro camino rodeado de vegetación que nos llevará hasta la Gola de Puchol, que cruzamos por un puente.


Cucumber en el puente de la Gola de Puchol

Desde la Gola llegamos enseguida al Lago del Saler, un lago artificial que resulta un bonito rincón para pasear, merendar, o pasar un rato muy placentero.



El Lago del Saler, un lugar para perderse

4 comentarios:

El Impenitente dijo...

Ya sabía yo que Cucumber no perdería una oportunidad de hacerse una foto con Mayor Oreja.

Y presento mis respetos a alguien que, estando perjudicada, es capaz de pegarse un tute. Yo ya no soy capaz ni casi en dos días.

Yo ahora ando liado por Algimia de Alfara por temas laborales, en el nuevo vertedero. Antes, hace años, tuve que ir mucho a Alfara de Algimia, a una papelera que hay allí. Si no fuera por el trabajo no conocería ni la décima parte de la provincia.

Anónimo dijo...

Que envidia, menudo weekend, fiesta etilica+bici,Slim ahora si que sabemos que eres una campeona, qué más se puede pedir

Slim dijo...

yo si no fuera por la bici no conoceria nada de la provincia ;-)

y lo de salir+bici, al principio costó un poco, pero la verdad es que enseguida me encontre genial! la bici lo cura todo!

Anónimo dijo...

Alfara es un pueblo muy bonito! ademas su gente es agradable y muy sociable. es un pueblo que tiene muchas cosas para visitar: los arcos, la cisterna el lavadero. iglesia , ermita..!

LO RECOMIENDO!