Me gusta el fútbol

Se acabó la bici, empieza el fútbol: este viernes día 11 se celebra el partido inaugural de la madre de todos los eventos deportivos (con permiso de las Olimpiadas): el Mundial de Fútbol, que este año 2010 se celebra en Sudáfrica, tan lejos que al principio nos entró el miedo de que los partidos fuesen a las cuatro de la mañana, hasta que nos enteramos de que a pesar de encontrarse a más de 8000 kilómetros de distancia veremos el fútbol a la misma hora que ellos: a las 13.30, a las 16.00 y a las 20.30. Eso si nos aclaramos si lo echan en tele5 o en la Cuatro o los tenemos que ver por Internet, que en esta casa somos forofos pero no tenemos Canal + (sus afortunados abonados verán todo el mundial y sin JJ Santos).

Los que seguís el blog y los que nos conocéis un poco sabéis que nos gusta el fútbol. Nuestros equipos ligueros, el Deportivo y el Zaragoza, no nos dan muchas alegrías, pero seguimos igual al Barça que al Atlético en sus competiciones europeas (animados por Sisterboy, Vargtimen y el Impenitente), pero también al Madrid, y al Sevilla y hasta a los equipos alemanes nos da por seguir. Pero no hay equipo al que yo siga con mayor afición que a la selección española, qué se le va a hacer, y eso que hasta hace cuatro días, era tener moral.



Se ve que el mundial de España 82, con mi toalla de Naranjito comprada en Cullera, me traumatizó y juré ya entonces ante dios, como Escarlata o'Hara, que jamás volvería a pasar hambre...de gol. Con 15 años recién cumplidos me enamoré de Michel en México 86 (cuanto te echo de menos como comentarista Michel!), y en Italia 90 me hice germanófila convencida (hasta hoy es mi segundo equipo en los mundiales). Llegó el mundial del 94 y con él, el codazo de Tassoti, el odio a la Squadra Azzurra y a todo lo azzurro que se le pareciese, y el fracaso de nuevo en Francia 98, la Francia de Zidane, otra vez eliminada España a la primera de cambio y a quitar las fotos de la pizarra del salón. En el de Corea nos estafaron un gol, y en el de Alemania, que ya conté en este blog, empezamos genial y acabamos fatal.

Y así, con algún partido bueno, alguna genialidad, alguna pifia, penaltis fallados, faltas nunca vistas, goles memorables, y algunos autogoles, llegamos a la Eurocopa 2008 con el mismo espíritu de siempre (yo): esta vez si!. Aunque sólo me lo creía yo, y la Cuatro, que hizo unos anuncios de Podemos!!!. Y Pudimos. Pudimos. Pudimos.

Qué queréis, empieza el Mundial. Yo siento lo mismo de siempre, el mismo gusanillo. Nos esperan tardes de fútbol, grandes equipos, goles y más goles. Brasil, Argentina, Holanda, Inglaterra, Alemania, Italia. Y España. Ganar un mundial es difícil, yo confío en conseguirlo, pero de momento estoy contenta, tan contenta, con mi álbum de cromos, con mi especial de El País, mi camiseta de Torres, la bufanda, las cervezas en la nevera, todo preparado para la fiesta del fútbol. Y que juguemos. Que nos divirtamos. Y , por favor, que ganemos.